El número de personas que han pedido ayuda a Cáritas en España se ha triplicado entre 2007 y 2011, año en que se ha superado el millón, anunció este jueves esta organización asistencial católica dando la voz de alarma sobre la progresión de la pobreza en el país.

El número de peticionarios de ayuda pasó así de 370.251 personas en 2007, antes de que estallara la crisis económica, a 1.015.276 en 2011, subrayó la organización en un informe titulado “De la coyuntura a la estructura. Los efectos permanentes de la crisis”.

Entre las principales causas de este aumento de la pobreza, Cáritas identificó “un proceso sostenido de destrucción de empleo, que reduce de manera drástica las posibilidades de ingresos económicos en numerosos hogares; y la consolidación de la reducción y agotamiento de las ayudas de protección social”.

El desempleo sigue subiendo a niveles récord en España y afecta al 24,63% de la población activa, mientras el país está en recesión e inmerso en una política de austeridad sin precedentes. Los hogares con todos sus miembros en paro alcanza ya 1,737 millones.

En el marco de nuevas medidas de austeridad anunciadas en julio para sanear las cuentas del país, el gobierno de derecha redujo los subsidios de desempleo, a partir del sexto mes, del 60% al 50% del salario.

“Entre las necesidades básicas más demandadas entre 2007 y 2011, el mayor aumento se ha producido en el número de ayudas económicas para alimentación, seguidas de ropa/calzado y vivienda. Por detrás aparecen otras necesidades como gastos sanitarios y legales”, subrayó Cáritas.

Respecto al perfil de los peticionarios de ayuda, las mujeres “siguen siendo el rostro más visible”, destaca la organización, que pone también de relieve el gran número de desempleados “que han pasado de ser ‘recientes’ –al inicio de la crisis– a ser de larga duración”.

La mitad de las personas que han recibido ayuda en 2011 son inmigrantes, según este informe, “un tercio de los cuales están en situación de irregularidad”.

Y los inmigrantes, muchos de ellos latinoamericanos, se cuentan entre los que más sufren los recortes presupuestarios: desde el primero de septiembre, únicamente aquellos en situación regular tiene acceso gratuito al sistema de sanidad pública.