El ministro de Salud Jaime Mañalich aseguró este martes que la joven madre que fue trasplantada de hígado, evoluciona favorablemente luego de la compleja cirugía a la que fue sometida en el Hospital Clínico de la Universidad Católica de Santiago.

Lo anterior, luego de realizar una visita a Katherine Collao Fernández, paciente que ingresó al recinto asistencial el pasado viernes 31 de agosto trasladada desde la Región de Valparaíso debido a una falla hepática fulminante con un embarazo de 27 semanas que debió ser interrumpido.

En la oportunidad, el secretario de Estado aseguró que la joven madre “tuvo tuvo una operación muy exitosa, está iniciando su recuperación y queremos felicitar al doctor Guerra, doctor Martínez y el equipo quirúrgico que llevó adelante toda esta operación”.

Además, Mañalich reiteró la necesidad de que más personas acepten ser donantes. “Esperamos tener una cifra de donantes multiorgánicos que superen los 200, lo que nos permitiría llegar a fin de año en el orden de 400-450 donantes que es nuestra meta”, añadió.

“En Chile hay 1.500 personas esperando diversos órganos, la espera más significativa es el trasplante de riñón”, reflexionó el titular de Salud.

Por su parte el médico que encabezó la cirugía, Ricardo Rabagliati, aseguró que “la evolución de la madre ha sido positiva, dentro de lo que se espera. Son muy importantes estas 48-72 horas en el sentido de ir mejorando las complicaciones”.

En relación al recién nacido, el profesional indicó que tiene un peso adecuado para su periodo de nacimiento, agregando que “no hubo complicaciones dentro de lo que se espera de estas cirugías, no aparecieron inconvenientes inesperados, estamos satisfechos”.

Por último, llamó a la cautela pues a su juicio “son personas que han sufrido una condición bastante crítica, estamos contentos pero tenemos que ofrecerles todos los cuidados y estar atentos a su evolución”.

El trasplante, a cargo de 15 médicos, se inició cerca de las 10 de la noche del lunes y culminó pasadas las 3 de la madrugada de este martes, después que una familia generosa de Puerto Montt, que había sufrido la muerte cerebral de un hijo, donó los órganos, entre estos el hígado para Katherine, el cual fue traído anoche a Santiago para la operación.

Katherine, con un embarazo de menos 7 meses, sufrió una hepatitis fulminante la semana pasada en Quillota, fue trasladada a un centro asistencial de Viña del Mar, el viernes traída al Hospital Clínico de la Universidad Católica, y el sábado se le interrumpió el embarazo, a través de una cesárea. El bebé, de 37 centímetros y pesó un kilo 90 gramos, está recuperándose en incubadora, también en ese centro asistencial capitalino.

Ayer, antes del trasplante, la joven presentó un edema cerebral y fue necesario mantenerla en estado hipotermia con el fin de bajar su temperatura corporal y reducir la presión de su cerebro, y afortunadamente llegó el hígado para que fuera intervenida.