La selección olímpica de Estados Unidos continúa con su preparación para defender la medalla de oro lograda en Pekín y este jueves venció a Gran Bretaña por 118-78 en un partido amistoso disputado en el MEN Arena de Manchester.

El equipo NBA logró una cómoda victoria ante los anfitriones de los Juegos a díez días de su debut ante la selección de Francia.

Resultó curioso ver cómo los 17.000 espectadores que se congregaron para ver el partido animaron más a Kobe Bryant, Lebron James y compañía que a su propia selección.

Deron Williams y Carmelo Anthony fueron los máximos anotadores visitantes con 19 puntos cada uno en el primer partido que jugaba la selección de baloncesto de Estados Unidos en Gran Bretaña desde los Juegos Olímpicos de 1948.

En el equipo local brilló Deng, que mostró su clase mundial con 25 puntos, mientras que Pops Mensah-Bonsu logró 12 y aportó nueve rebotes.

Estados Unidos, que afronta los Juegos como gran favorito, ha ganado 52 de los 53 partidos que ha disputado desde que perdiera hasta tres encuentros durante los Juegos Olímpicos de Atenas en 2004.

Con los estadounidenses más preocupados por divertir a los entusiasmados espectadores, Gran Bretaña pudo mantener el pulso al partido al menos durante los primeros minutos.

Finalmente, la plantilla NBA aceleró y se marchó con un 55-37 al descanso después de dos mates de Kevin Durant y un triple de Lebron James.

El campeón de la NBA con los Miami Heat siguió entonado en el tercer cuarto y anotó 10 puntos, mientras que Deron Williams hizo catorce para llevar el marcador a 77-46.

Los británicos intentaron buscar el lado positivo y encontraron al universitario Andrew Lawrence, sorpresa del equipo olímpico, que anotó varios triples mostrando confianza ante un imponente rival que exhibió su inmensa superioridad.