El reactor número 3 de la central de Ohi (al oeste de Japón) fue reactivado este domingo, pese a la oposición de unos ciudadanos traumatizados, marcando la primera reactivación real desde el accidente atómico de Fukushima, en marzo de 2011, y el fin de un período sin energía nuclear.

Pese a una opinión pública muy dividida y manifestaciones recurrentes, Kansai Electric Power puso en marcha ese reactor hacia las 21h locales (las 12h GMT), según varios medios de comunicación japoneses. El accidente nuclear de Fukushima fue provocado por un sismo y un maremoto que devastaron el litoral del noreste de Japón el 11 de marzo de 2011.

La reacción en cadena debe ser confirmada el lunes de mañana y la producción de electricidad comenzará el miércoles 4 de julio. El 16 de junio, esta empresa recibió el aval de las autoridades locales y del primer ministro para poner nuevamente en servicio los reactores Nº 3 y Nº 4 de Ohi. Inmediatamente comenzó los preparativos.

La municipalidad de Ohi, la prefectura de Fukui (la provincia donde se encuentra el reactor) y el Gobierno central consideraron que esos reactores podían ser reactivados en forma segura basándose en tests de resistencia ratificados por las instancias de control, a pesar de advertencias de los sismólogos y de que las obras de consolidación contra sismos y tsunamis recién habrán terminado dentro de tres años.

“Mi responsabilidad es proteger a los ciudadanos”, reconoció el primer ministro, Yoshiko Noda. Este prometió que hará “todo lo que esté a su alcance para que no se produzca otro accidente como el de Fukushima”, incluso en el caso de una nueva catástrofe natural. Sin embargo, insistió en que “la energía nuclear es una fuente de electricidad crucial”.