El químico farmacéutico de la Universidad San Sebastián (USS), Christian Tapia, recomendó que cuando se vaya a consumir fármacos que contienen Clormezanona sea bajo prescripción médica y con controles durante su uso.
El mencionado relajante es utilizado para el alivio del espasmo muscular agudo, causado por un traumatismo o distensión muscular.
El Instituto de Salud Pública (ISP) confirmó que existen 30 informes de reacciones adversas a fármacos de este tipo.
Según el ISP, hay una tasa importante de uso indebido de estos fármacos, especialmente de productos que lo contienen en asociación con Diazepam en bajas dosis.
Tapia dijo que “el consumo de Clormezanona puede producir efectos secundarios como sedación, confusión y alucinaciones visuales transitorias. También se puede observar náuseas, rubor, excitación, temblor, dolor de cabeza y erupciones cutáneas”.
El químico farmacéutico sostuvo que hay una señal clara de abuso cuando la Clormezanona se ingiere en dosificaciones superiores a las necesarias o recomendadas por un profesional médico.
“En estos casos la Clormezanona genera un efecto sedante, sensación de agrado y relajo que puede llevar no sólo a abuso sino también a adicción, entendiendo que estos efectos de recompensa conducen a una conducta repetitiva en el consumo”, dijo el profesional.
Respecto al endurecimiento de la condición de venta al exigir receta retenida, el profesional advirtió que “la medida de control impuesta por ISP va en favor de la salud pública, pero deja en discusión el cumplimiento de la legislación vigente. Aquí es donde surge la duda sobre si un medicamento que exige presentación de receta cumple con la exigencia”.
Por otra parte, hay que tener presente que las poblaciones de riesgo por consumo de este fármaco son personas de tercera edad, pacientes con daño renal o hepático, lactantes, madres nodrizas, pacientes con enfermedades del ánimo como depresión, pacientes que consumen alcohol, pacientes que manejen maquinarias o vehículos y mujeres embarazadas.
Respecto a la forma correcta de consumirlos, Christian Tapia advirtió que hay que considerar que todos los medicamentos tienen riesgos potenciales en la salud, por lo que la recomendación es consumirlos bajo prescripción médica y con controles durante su uso.