Científicos británicos descubrieron un tipo de anticuerpo en ratones que bloquea una característica de la enfermedad de Alzheimer, con lo cual surge una potencial nueva vía de tratamiento, según un estudio divulgado el martes en Estados Unidos.

Los anticuerpos bloquean una proteína llamada Dkk1 que a su vez detiene la formación de placa amiloide en el cerebro, un factor clave en el avance de la enfermedad de Alzheimer, indicó la investigación publicada en el Journal of Neuroscience.

Cuando esta placa se acumula hace que se pierda la conexión entre las neuronas, denominada sinapsis, en la parte del cerebro conocida como hipocampo, que se ocupa del aprendizaje y la memoria.

“Estos nuevos hallazgos plantean la posibilidad de que identificar esta proteína Dkk1 secretada podría ofrecer un tratamiento eficaz para proteger las sinapsis contra el efecto tóxico del amiloide-B”, explicó la autora principal del estudio, Patricia Salinas, del Departamento de Biología Celular y Biología del Desarrollo de la Universidad College de Londres (UCL).

“Es importante destacar que estos resultados plantean la esperanza de un tratamiento y quizás la prevención del deterioro cognitivo temprano en la enfermedad de Alzheimer”.

La investigación sólo se ha realizado en ratones y se necesitan mayores estudios para ver si sería relevante continuarla en humanos.

Investigaciones anteriores demostraron que los cerebros de personas con Alzheimer, investigados en autopsias, tienen niveles más altos de Dkk1 que los cerebros normales, pero los científicos no tienen certeza de la razón.

El último estudio en ratones demostró que los animales expuestos a anticuerpos contra Dkk1 lograban tener más sinapsis que otros ratones con Alzheimer que no recibieron el tratamiento.

Hasta ahora no hay cura para el Alzheimer, una enfermedad neurológica progresiva que junto con otras formas de demencia afecta a más de 35 millones de personas en todo el mundo.