El papa Benedicto XVI criticó el viernes la “sumisión incondicional a las leyes del mercado o de las finanzas”, en un discurso pronunciado poco después de iniciar una visita de tres días a Benín.

“No hay que tenerle miedo a la modernidad, pero tampoco se puede construirla olvidándose del pasado”, dijo. “Hay que acompañarla con cautela, evitando escollos (…) como la sumisión incondicional a las leyes del mercado o de las finanzas”, agregó, durante un discurso en el aeropuerto.

El pontífice también consideró necesario evitar “el nacionalismo exacerbado e inútil o el tribalismo, (…) la politización extrema, las tensiones interreligiosas en desmedro del bien común o el debilitamiento de los valores culturales, éticos y religiosos”.

Benedicto XVI pronunció un discurso en el aeropuerto antes de recorrer Cotonú, la capital económica del país en un ‘papamovil’ y posteriormente visitar la catedral.

Cientos de personas se congregaron en el aeropuerto para dar la bienvenida al pontífice, de 84 años, entre las que había mujeres con vestidos elaborados con telas con fotos del Papa, así como numerosos agentes de seguridad.