El gobierno ecuatoriano pagará por la entrega de licor adulterado para detener las intoxicaciones que se han cobrado la vida de 47 personas desde mediados de julio, anunció este lunes el ministro de Salud, David Chiriboga.
“Las personas tratando de guardar la inversión que han hecho, al comprar este licor adulterado, lo han escondido. Por eso hemos planteado una propuesta de pagar por la devolución de este tipo de licor”, dijo el ministro tras una reunión de varios miembros del gabinete.
La medida, que prevé que el alcohol sea entregado por los comerciantes en las intendencias de policía, fue anunciada luego de que el pasado fin semana un hombre de 23 años murió por ingerir licor con metanol (de uso industrial) en la localidad de San Miguel (centro, provincia de Bolívar).
Otras 35 personas presentaron síntomas de intoxicación en ese municipio, donde se prohibió la venta y consumo de licor hasta este martes, pero varias ya fueron dadas de alta, según la cartera de Salud.
El deceso en San Miguel elevó a 47 el número de fallecidos por la ingesta de metanol en todo el país desde la primera muerte el pasado 12 de julio.
Tras la cita de este lunes el ministro de Seguridad, Homero Arellano, señaló que se intensificarán los operativos para incautar alcohol sin registro sanitario y detener a sus distribuidores.
“Se va a intensificar los operativos que ya se venían haciendo con la Policía, los intendentes de policía, los gobernadores y también eventualmente medidas esporádicas, sorpresivas, con Fuerzas Armadas”, indicó Arellano en rueda de prensa.
El más reciente balance del ministerio de Salud indica que en total se han confirmado 164 casos de intoxicación con alcohol metílico, mientras que un número no precisado de personas quedaron ciegas o sufrieron daños renales.
La emergencia obligó a declarar el estado de excepción por dos meses y la ley seca a nivel nacional por tres días el 17 de julio. Esta última medida se replicó luego en las provincias de Napo (este) y Los Ríos (suroeste), donde se registraron 20 muertes.