Luego que se hiciera pública la nueva eliminación de alimentos realizada por la municipalidad de Laja, las autoridades de la comuna han guardado hermético silencio, ante la desnaturalización que volvió a asombrar a la comunidad.

Cabe recordar que este miércoles la autoridad sanitaria de Bío-Bío señaló que al iniciar la semana, habían acudido a la ciudad del papel a petición del propio municipio, para certificar el vencimiento de más de 790 kilos de comida.

Los víveres, entre los que se contaban arroz, harina, leche, azúcar, por nombrar algunos; fueron triturados por un camión recolector de basura y luego botados en el vertedero de Laguna Verde, todo dentro de la norma exigida por el Ministerio de Salud.

Ante esto, la comunidad reaccionó con asombro por los casi 800 kilos de comida perdida, pese a que las peticiones de ayuda en víveres que recibe la Dirección de Desarrollo Comunitario de Laja son constantes, las cuales suben siempre en temporada de invierno.

Por eso, los habitantes de Laja manifestaron en BioBioChile su descontento con la desición del Alcalde Vladimir Fica, argumentando que es una burla para los más pobres la deteminación de las autoridades de haber botado los alimentos, catalogando el hecho como una aberrante maldad.

Sin embargo, el muncipio no ha entregado hasta el momento explicaciones de la desnaturalización, enviando sólo un escueto comunicado de prensa donde se puntualiza que el 7 de marzo se había enviado a la autoridad sanitaria
la petición de fiscalización de la eliminación de la comida que estaba vencida.

Luego de la breve misiva, nada se ha sabido entorno a los alimentos que fueron botados en vez de entregados oportunamente a potenciales beneficiaros de canastas familiares, argumentos que la comunidad de Laja requiere para -como ellos mismos señalan- se administren bien los recursos de los vecinos de la localidad de Laja.