Una jueza estadounidense decidió este jueves que una propuesta para prohibir la circuncisión en San Francisco no podrá ser sometida a referéndum, a pesar de haber conseguido el apoyo necesario.
La iniciativa de consulta popular, que habría tenido lugar en noviembre luego de que sus promotores reunieran las 7.000 firmas necesarias, habría convertido la circuncisión de los menores de edad en un delito menor excepto en casos en que fuera necesaria por motivos médicos.
Pero la jueza Loretta Giorgi falló a favor de una coalición de grupos religiosos, médicos y familiares que afirmaban que la propuesta de prohibición violaba una ley estatal que prohíbe a los gobiernos locales regular sobre procedimientos médicos.
Giorgi dijo que la medida no “tenía ningún propósito legítimo” y ordenó retirarla.
Los promotores de la iniciativa prometieron apelar, aunque podrían no tener el derecho legal de hacerlo.
Lloyd Schofield, de 59 años y quien ha estado al timón de la propuesta, afirma que la circuncisión es, básicamente, una mutilación genital culturalmente aceptada y debería responder a una decisión individual y no de los padres.
La medida habría convertido la circuncisión de un menor en un delito imputable con un año de prisión y una multa de 1.000 dólares.