“Tengo los pies congelados”, le dijo el portero Renny Vega a los asistentes del banco venezolano durante el partido ante Paraguay disputado el miércoles en Mendoza (oeste) por el pase a la final de la Copa América.

El intenso frío fue la peor pesadilla para los jugadores y para los simpatizantes que soportaron temperaturas gélidas para alentar a sus equipos.

Pero además del frío que padeció en el partido ante Paraguay en Mendoza (oeste), Vega sufrió un mal momento en la prolongación del juego tras un final 0-0 en los 90 minutos reglamentarios.

El árbitro dio comienzo al complemento cuando el portero estaba aún en el centro del campo de juego, por lo que el golero debió hacer gala de su velocidad para ocupar a tiempo su lugar en el arco en medio de una arremetida de Paraguay que dejó con el corazón paralizado a miles de simplatizantes de la vintotinto.