Este martes las selecciones de Chile y Perú se enfrentan en el marco del Grupo C de Copa América, en la versión número 19 del denominado “Clásico del Pacífico” en este torneo continental de selecciones.

La “Roja” y el elenco “banda sangre” se enfrentaron por primera vez en este certamen en 1935, encuentro que ganó Perú por la cuenta mínima, similar marcador que registra el último confronte que data de la Copa América de Ecuador 1993.

Pese a lo anterior, hay un empate entre los partidos ganados, con 6 pleitos para cada uno y 6 empates, aunque la diferencia de goles favorece claramente a la Selección peruana con +3.

Los partidos más recordados, por cierto, son las victorias para la “Roja” en los torneos de Chile 1955 y Uruguay 1956, donde se triunfó por 5 a 4 y 4 a 3, respectivamente.

Pero más allá de los números, lo cierto que este es uno de los clásicos más importantes de Sudamérica, superado sólo por el enfrentamiento entre Brasil y Argentina, relegando incluso al “Clásico de La Plata” entre la Uruguay y la “Albiceleste”.

En la previa del cotejo de este martes el técnico Markarián ha insistido en hacer un llamado a no confundir los conflictos políticos en algo tan distinto como es el fútbol, en donde las rivalidades se resuelven con goles.

Aunque la atención de la prensa estará centrada en el estadio Malvinas Argentinas, principalmente por el choque de estilos entre un conservador esquema del entrenador ex U. de Chile, y el posesivo, y a ratos ofensivo, estilo de Claudio Borghi, ex técnico de Colo Colo.

En Perú las expectativas están en un equipo que de la mano del “charrúa” ha encontrado orden y solidez en lo defensivo, mientras que en nuestro país, las esperanzas están cifradas en un equipo que aún muestra rasgos del ofensivo esquema del anterior técnico Marcelo Bielsa, y que el “Bichi” ha sabido matizar con mayor dominio control del balón.