El fútbol brasileño estará ampliamente representado en la final de la Liga de Campeones que disputarán el sábado en Londres el Manchester United y el Barcelona, al contar entre los dos equipos con seis jugadores del país sudamericano en sus plantillas.

El Barcelona tiene a tres defensas brasileños, Dani Alves, Adriano y Maxwell, mientras que en el Manchester United están el volante Anderson y a los gemelos Rafael y Fabio da Silva.

Dani Alves y Adriano, que iniciaron su carrera en Bahia y Curitiba respectivamente, llevan vidas paralelas. Juntos ganaron el Mundial Sub-20 de Emiratos Árabes Unidos en 2003 y también compartieron los títulos de la Copa de la UEFA del Sevilla en 2006 y 2007, antes de llegar al Barcelona.

Ahora pueden compartir un nuevo éxito, ganando juntos la Liga de Campeones. Aunque Dani Alves, de 28 años, que llegó antes a Cataluña, ya conoce lo que es ganar el trofeo europeo más prestigioso con el Barcelona en 2009 cuando el equipo azulgrana se impuso en la final de Roma por 2-0 al Manchester United.

Alves se perdió aquel partido final al estar suspendido por acumulación de tarjetas amarillas.

Para Dani Alves, el Manchester United es mucho mejor equipo desde la marcha del portugués Cristiano Ronaldo en 2009 al Real Madrid.

“Este Manchester United es un equipo mucho más imprevisible que cuando estaba Cristiano Ronaldo. Han construido un equipo mucho más equilibrado, más fuerte que hace dos años”, afirmó Alves.

Para Maxwell, por su parte, este partido es una revancha personal. El lateral de 29 años dejó el Inter de Milán en 2009 con la intención de ganar la Liga de Campeones con el Barcelona.

Pero la fortuna le dio la espalda y su anterior club, el Inter, eliminó al Barcelona en la semifinal de la Liga de Campeones de 2010 y el equipo italiano acabaría ganando la competición.

Por eso, Maxwell, ex jugador del Cruzeiro, Ajax de Amsterdam e Inter de Milán, quiere resarcirse ganando la competición este año.

Además de Dani Alves, otro de los brasileños que ya sabe lo que es ganar una Liga de Campeones es Anderson, que se hizo con el triunfo con el Manchester United en la final de Moscú de 2008 contra el Chelsea.

El ex jugador del Gremio y del Oporto entró en aquel partido en el último minuto de la prolongación sustituyendo a Wes Brown y convirtió el sexto lanzamiento de su equipo en los penales, en un duelo que ganó el Manchester United por 6-5 desde los once metros.

Anderson, de 23 años, tampoco jugó todo el partido en la final perdida por el Manchester United contra el Barcelona en 2009 en Roma, ya que fue sustituido en el descanso.

“Creo que esta vez podemos ganarlos”, afirma Anderson. “Barcelona tiene un gran equipo y buenos jugadores como Messi y Xavi, pero el United es un equipo grande y nuestro nivel es parecido al de ellos. Creo que somos el único equipo al que el Barcelona respeta mucho”, añade.

“Tenemos grandes jugadores que pueden parar a Messi. No será fácil para ellos derrotarnos. La final está a un 50% de posibilidades para cada uno”, añadió.

“Messi es de otro planeta pero no nos tenemos que centrar sólo en él, sino en todo el Barcelona. El título se puede definir por detalles y por un pequeño error pierdes una final”, concluyó.

Los otros dos jugadores brasileños del Manchester United son los gemelos Rafael y Fabio da Silva, dos jóvenes laterales derechos de apenas de 20 años, criados en la cantera del Fluminense, que buscarán su primer título europeo.

Por último, el Barcelona tiene otro jugador con sangre brasileña, Thiago Alcántara, hijo de Mazinho, aquel volante que fue campeón del mundo con la auriverde en Estados Unidos en 1994.

Pero Thiago, de 20 años, nacido en Bari (Italia) y criado en Galicia, ha elegido jugar con la selección española y con la Roja disputará en junio la Copa de Europa Sub-21 en Dinamarca.

Tanto si gana el Manchester United como si lo hace el Barcelona, Brasil estará presente en el equipo campeón de Europa.