Durante esta jornada, el Tribunal de Juicio Oral de Cañete condenó por unanimidad a Javier andres Morales Fierro, de 18 años, por el delito de parricidio.

El sangriento episodio ocurrió en septiembre del año pasado, en la casa 2 del pasaje B de Cañete, cuando el joven, antes de ir a clases, asesinó a su madre Enriqueta del Carmen Fierro Correa (56), con 21 puñaladas.

Al ser interrogado por la policía aseveró que un encapuchado ingresó al domicilio para robarles, y movió cajones y papeles para simular el atraco, culpando al desconocido del homicidio.

Sin embargo, los detectives de la Brigada de Homicidios determinaron que el relato del joven caía en contradicciones, frente a lo cual finalmente confesó.

Había planificado el asesinato de su madre hace varios días, debido a lo estricta que era con él por su rendimiento escolar y rechazaba a su polola.

El fiscal jefe de Cañete, Luis Morales, solicita una pena de 20 años de prisión.