El diputado Matías Walker (DC) presentó este lunes al presidente de la ANFP, Sergio Jadue, una iniciativa que busca “sancionar a los dirigentes que apoyen a las barras bravas”.

Tras reunirse en las dependencias del recinto de avenida Quilín, el parlamentario de la Comisión de Deportes de la Cámara Baja dio su parecer sobre la cita donde se abordó la violencia en los estadios.

Al término del encuentro, Walker calificó de “buena reunión con el presidente de la ANFP para explicar nuestro proyecto con el diputado Jorge Burgos, que persigue sancionar a los clubes y dirigentes de los clubes que apoyen a las barras bravas que producen hechos de violencia en los estadios”, indicó.

Walker detalló que con este proyecto se pretende transparentar la relación entre los clubes y las barras bravas, y aseguró que cualquier aporte monetario a las barras tendrá que ser informado en la contabilidad de los clubes y a la autoridad del fútbol, la intendencia y a Carabineros.

El representante de distrito N°8 de Coquimbo, Ovalle y Río Hurtado estima que “el plan Estadio Seguro del Gobierno no va a tener efecto si los dirigentes en vez de ser parte del problema no son parte de la solución. No queremos ver a dirigentes apoyando el transporte o el ingreso de las barras bravas a los recintos deportivos para que se produzcan hechos tipificados en la ley de violencia”.

“Cuando ello ocurra, con este proyecto los dirigentes se verán expuestos a severas sanciones económicas que pueden llegar a las 400 UTM”, añadió.

Destacó que “hemos encontrado una buena disposición del presidente de la ANFP para erradicar la violencia; creemos que es muy importante desincentivar que los dirigentes y los clubes apoyen a las barras bravas que provocan violencia. Y esto, complementado con el proyecto del Gobierno, que va ser expuesto el miércoles en la Cámara por el ministro del Interior, creemos que será una gran avance para erradicar la violencia y que la familia vuelva a los estadios del futbol chileno”, cerró.

El presidente Jadue, por su parte, expresó su disposición a que los clubes y dirigentes respondan patrimonialmente por los hechos de violencia en los estadios producidos por las barras bravas, y que conllevan omisiones o faltas graves a la legislación vigente. De hecho el tribunal de Asuntos Patrimoniales de la ANFP ha establecidos sanciones patrimoniales para algunos clubes.