Luego de los problemas vividos tras el terremoto y posterior tsunami del 27 de febrero de 2010, donde producto de la tragedia se provocó un apagón en el Sistema Interconectado Central (SIC), la compañía Chilectra capitalizó una nueva experiencia, que dejó importantes conclusiones para la implementación de sus planes de calidad, inspecciones, mantenimiento y contingencia, entre otros, durante el 2011.

Chilectra precisó que si bien, una vez enfrentada la emergencia, recuperó el servicio del 80% de sus clientes en menos de 12 horas y reestableció la operación normal de su sistema eléctrico al octavo día, “las crisis siempre entregan instancias de aprendizaje y mejora”.

Por tal motivo, la compañía eléctrica informó que para este año incorporó una nueva tecnología en el funcionamiento de sus instalaciones, incrementando los planes de Inspección y Mantenimiento de la infraestructura eléctrica, reforzando además los sistemas de monitoreo, operación, y atención de clientes, con el propósito de favorecer la continuidad y seguridad de suministro.

Los proyectos en ejecución están orientados a la calidad de servicio, seguridad, comunicaciones operativas, monitoreo y redes inteligentes principalmente.

“Se continuará avanzando con el aumento de la capacidad de las redes eléctricas de alta tensión, aplicando tecnologías de punta, que no sólo permitan satisfacer la creciente demanda de energía de la Región Metropolitana, sino que también tengan el menor impacto visual de las redes en la ciudad”, afirmó la empresa.

También se alcanzarán importantes avances en lo referente a la aplicación del Plan de Redes Inteligentes de la compañía, cuyo objetivo es la integración de la infraestructura eléctrica con las nuevas tecnologías de la electrónica, sistemas de información y comunicaciones.

Durante 2010, Chilectra aplicó un Plan de Inspección a los 18.000 kilómetros de su red eléctrica, tanto aéreas como subterráneas; implementó un Plan de Revisión en las 54 subestaciones que alimentan el sistema de distribución; revisó uno a uno 400 alimentadores de media y baja tensión; y reemplazó más de 1.000 postes dañados.

Producto del terremoto, en dos días se realizó un trabajo equivalente a dos meses normales y en 12 días se efectuaron trabajos, que en condición normal, se hubiesen realizado hasta en 2 años y medio.