El ministro en visita extraordinaria, Alejandro Solís, procesó por el delito de estafa a Lidia Esmerita Reyes Millar por haber obtenido fraudulentamente los beneficios económicos que el Fisco chileno entrega a los familiares de detenidos desaparecidos, de acuerdo a las disposiciones del la Ley Nº19.980.
La causa, que se denominó “Falsos Detenidos Desaparecidos”, se enmarca dentro de las denuncias realizadas por el Ministerio del Interior durante 2009, cuando se destaparon una serie de casos de personas que denunciaron la muerte de familiares a manos del Régimen Militar, con el fin de poder obtener becas y pensiones por parte del Estado.
En el caso puntual de la encausada, ella denunció a la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación, en 1990, que su ex marido Pedro Millas Márquez fue un Detenido Desaparecido, en circunstancias de que éste falleció en marzo de 1982 en un accidente ferroviario.
A la procesada se le concedió el beneficio de la excarcelación provisional bajo una fianza de cien mil pesos.