Jayla Hamm, de 18 años, y su pareja, Corde Honea, de 19, no encontraron nada mejor que “pegar” a su hijo de 1 año 10 meses a la pared. Ésto para evitar castigarlo.

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Este hecho ocurrió en Nebraska, cuando la madre -junto a su pareja- decidieron pegar al menor con cinta industrial a la pared, tras una noche de fiesta.

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No contento con ésto, el joven mostró las fotografías del niño a sus amigos, los que denunciaron el caso a la policía.

Entre las imágenes, según informó Contexto, había una en la que los jóvenes se mostraban sonrientes cuando el menor intentaba zafarse de la cinta de las manos. En tanto en otra, aparece el menor tratando de alcanzar la mamadera que su madre también pegó a la pared.

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Así también, la Policía afirmó que la pareja lo hizo porque “les parecía gracioso” y no para darle un escarmiento al bebé.