Miembros armados de una tribu yemenita volaron el sábado de madrugada un oleoducto en el este de Yemen en respuesta a un ataque contra uno de sus jefes, acusado de dar refugio a miembros de Al Qaida, indicaron fuentes tribales.

Este ataque tomó como blanco a un tramo del oleoducto que se encuentra a 6 km al este de la ciudad de Marib, que se encuentra a 170 km al este de Saná y es la capital de la provincia petrolera del mismo nombre, según estas fuentes.

A primeras horas de la mañana, una columna de humo negro se elevaba en dicho lugar, situado en el “kilómetro 40″.

Por el momento se ignoran las consecuencias de este ataque sobre la producción petrolera de Yemen.

Según las fuentes tribales, este acto de sabotaje fue una respuesta a un ataque del ejército contra la residencia de un jefe tribal, el jeque Naser Gamad ben Dawham, acusado de albergar a miembros de Al Qaida.