Con 272 detenidos concluyó un masivo operativo desarrollado por Carabineros en la Región Metropolitana. La diligencia se enmarca en los planes extraordinarios de seguridad coordinados entre el gobierno y las policías.
Cerca de 2 mil Carabineros se sumaron a los planes normales de vigilancia policial para fiscalizar de manera simultánea bares, botillerías, vehículos y peatones en la Región Metropolitana.
El operativo tuvo como fin regular la comisión de delitos, en especial durante los fines de semana, donde las riñas, asaltos y robos se incrementan.
Tras la diligencia el resultado arrojó cerca de 300 detenidos por diversos delitos como lo explicó el comandante de Carabineros Fernando Vera.
El masivo control preventivo permitió además detectar locales clandestinos de venta de alcohol y drogas, detener a personas con órdenes judiciales, incautar armas de fuego y blancas y fiscalizar que los negocios establecidos cumplieran con las patentes.
A modo de cifras, Carabineros detalló que las unidades policiales recorrieron en total 6 mil 716 kilómetros fiscalizando.