Irán podría renunciar a exigir que un eventual canje de uranio con las grandes potencias, se haga en su territorio siempre que obtenga “garantías concretas” sobre el intercambio, declaró hoy el jefe de la Organización de la Energía Atómica iraní, Ali Akbar Salehi.

“Irán sigue estando dispuesto a un canje de combustible, la condición es tener garantías concretas”, afirmó Salehi, citado por la página web de la televisión estatal.

“Hay muchas formas de darle a Irán garantías concretas, se puede debatir sobre estas garantías en negociaciones”, añadió en respuesta a una pregunta sobre la posibilidad de que el canje se realice en terceros países como Turquía.

“Estamos dispuestos a entablar negociaciones sin condiciones previas”, dijo, y recordó que “hay una propuesta iraní sobre la mesa”.

El enriquecimiento de uranio opone desde hace años Irán a las grandes potencias, sobre todo occidentales, que sospechan que Teherán oculta objetivos militares tras su programa nuclear civil. La República Islámica desmiente estas acusaciones.

La Agencia Internacional de la Energía Atómica, AIEA, propuso en octubre que Irán le entregue el 70% de su uranio con bajo índice de enriquecimiento para ser enriquecido al 20% en Rusia y luego transformado en Francia en el combustible que Teherán afirma necesitar para un reactor de investigación médica.

Invocando una “falta de confianza”, Teherán rechazó este proyecto y lanzo como contrapropuesta que el canje de combustible sea simultáneo y se haga en pequeñas cantidades, pero los occidentales se oponen a ello.

Inicialmente, Teherán mencionó la posibilidad de que el intercambio se lleve a cabo en terceros países como Turquía, Brasil o Japón, pero en febrero endureció su posición y exigió que tenga lugar en su territorio.

Entre tanto, Irán lanzó en febrero la producción de uranio enriquecido al 20%, lo que ha desatado la apertura de negociaciones entre las grandes potencias sobre la eventual adopción de nuevas sanciones contra Teherán.