Un atentado suicida contra los servicios de inteligencia en Kandahar, al sur de Afganistán, fue desbaratado el lunes por la policía, que mató a dos atacantes, en tanto que un kamikaze hizo estallar sus explosivos antes de llegar a su objetivo, anunciaron las autoridades locales.

Al iniciarse el ataque, un corresponsal de la agencia AFP había escuchado disparos de armas de fuego y una violenta explosión.

El ataque iba dirigido contra las oficinas del Consejo Nacional para la Seguridad (National Directorate for Security, NDS), afirmó a la AFP el jefe del gobierno de la provincia de Kandahar, Ahmad Wali Karzai.

“Fueron frenados por los guardias del NDS. Uno (de los kamikazes) hizo estallar la bomba que llevaba encima y los dos otros murieron en un tiroteo con las fuerzas de seguridad”, preció Karzai, hermano del presidente afgano Hamid Karzai.

Dos agentes del NDS y un empleado de una escuela fueron heridos, agregó el jefe del NDS.

Poco antes, un funcionario de los servicios de seguridad había dicho a la agencia AFP que los “terroristas”, como las autoridades designan a los talibanes, se habían refugiado en una escuela primaria contigua a la sede del NDS.

El fallido ataque tuvo lugar en el momento en que se celebraba una manifestación de protesta por la muerte de cuatro civiles, entre ellos una mujer y un niño, por disparos de soldados de la OTAN, según el gobierno local.

Unos 200 hombres se habían concentrado en el centro de la ciudad, donde quemaron neumáticos al tiempo que gritaban “¡Muerte a Estados Unidos! ¡Muerte a Karzai! ¡Muerte a su gobierno!”, indicó un corresponsal de la AFP.