Una espesa neblina dio paso a cielos despejados en Concepción y alrededores que intentan recobrar la normalidad tras el violento terremoto del sábado 27 de febrero.

Imagen: Eduardo Aroca Millán
Culminado el toque de queda a las 10:00 horas, personas de varios sectores del Gran Concepción debieron ir a proveerse de agua en camiones aljibes y ya comienzan a verse las filas en las afueras de farmacias y supermercados habilitados.
Parte importante de la población ya cuenta con con agua, electricidad y gas.
En cuanto a la seguridad, la futura Intendenta de la Región del Bío-Bío y actual alcaldesa de Concepción, Jacqueline Van Rysselberghe junto a Carabineros entregarán cifras de detenidos por saqueos, al tiempo que siguen apareciendo lavadoras, cocinas y televisores robados en las calles, ya que algunos saqueadores han decidido devolverlos.