Molestia generó en grupos ecologistas la posibilidad de que Hidroaysén detenga su trámite ambiental por hasta seis meses.

Luego que el Presidente de Enersis, Pablo Yrarrázabal, informara que solicitará la suspensión del trámite ambiental del Proyecto HidroAysén por entre cuatro y seis meses, grupos ecologistas reiteraron la idea que esta iniciativa debió ser rechazada hace mucho tiempo.

Las palabras del representante de Enersis, que controla el 59, 98 por ciento de Endesa, la cual junto a Colbún conforma la sociedad que lleva adelante la instalación de las cinco centrales en los ríos Baker y Pascua de Aysén, se producen luego que la Corema Regional enviara a principios de esta semana un compendio con mil 114 observaciones en un nuevo Icsara.

Según precisó el abogado Marcelo Castillo del Consejo de Defensa de la Patagonia, esta nueva suspensión no es más que una estretegia de la empresa para ganar tiempo, en un proyecto-que aseguró-debió haber sido rechazado con anterioridad.

La sociedad conformada por Endesa y Colbún está haciendo uso de un plazo legal para responder a las observaciones del Icsara, lo cual fue reconocido por la directora ejecutiva de la Fundación Terram, Flavia Liberona, sin embargo, coincidió con Castillo al afirmar que la iniciativa debió ser apartada, pues con esto, deberá ser tramitada en el Gobierno de Sebastián Piñera.

Fuentes de la empresa seguraron que aún no existe claridad en relación a la decisión de suspender el trámite ambiental.

Consignar que en octubre del año pasado, y tras once meses de paralización, HidroAysén retomó el trámite ambiental del megaproyecto hidroeléctrico tras las las 2 mil 649 observaciones realizadas al Estudio de Impacto Ambiental en el Icsara de noviembre de 2008