Durante esta mañana se concretó la donación de tratamiento para una menor de Los Ángeles que sufre del síndrome de Hurler, una costosa enfermedad de retraso sicomotor que afecta a uno de cada 150 mil recién nacidos.

Hace tres años, a Escarlet Escobar se le detectó dicha afección hereditaria de metabolismo, que consiste en que el afectado no puede descomponer cadenas largas de moléculas de azúcar y que se manifiesta con síntomas como sordera, retardo mental y crecimiento interrumpido.

Desde la gestación de su padecimiento fue tratada en el complejo asistencial angelino, donde según el neurólogo infantil, Álvaro Wicky, fue derivada a otros centros de mayor complejidad para realizar una serie de exámenes que determinaron su extraña enfermedad de tipo lisosomal.

Fue así como, tras una serie de gestiones, se consiguió que un laboratorio entregara el tratamiento a la pequeña, el que mensualmente tiene un costo de 5 millones de pesos.

Catherine Chamorro, madre de la menor, sostuvo que está feliz por esta donación que permitirá mejorar la calidad de vida de su hija.

Scarlet de 4 años 7 meses, deberá hospitalizarse un día a la semana de por vida para recibir gratuitamente una terapia de reemplazo enzimático que le permitirá estabilizarse.