Los pacientes a los que se les diagnostica precozmente un cáncer pulmonar duplican sus posibilidades de supervivencia si dejan de fumar de inmediato, en comparación con los que siguen fumando, según un estudio publicado en el British Medical Journal (BMJ).

Cigarro

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Los resultados del análisis de 10 estudios, realizado por el equipo de Amanda Parsons, de la Universidad de Birmingham (Gran Bretaña), sugieren que vale la pena proponer un tratamiento de ayuda para dejar de fumar a los pacientes a los que se diagnostica a tiempo el cáncer.

A lo largo de su vida, los fumadores corren un riesgo 20 veces mayor de desarrollar cáncer pulmonar, en comparación con los no fumadores.

Lo que se ignoraba es si era de algún modo beneficioso dejar de fumar después del diagnóstico del cáncer.

Los datos, que deberán ser completados con otros estudios, sugieren que el mayor riesgo de muerte es principalmente el progreso del tumor.

Los que dejan de fumar tienen una tasa de supervivencia 5 años después del diagnóstico de 63 a 70%, contra 29 a 33% para los que siguen fumando.

“Nunca es demasiado tarde para dejar de fumar, incluso cuando se tiene un cáncer al pulmón”, escriben en el BMJ Tom y Janet Treasure, profesores, respectivamente, de cirugía cardiotorácica y de psiquiatría, en Londres.