El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, declaró que permanecerá refugiado en la embajada brasileña como máximo “hasta el 27 de enero”, cuando finaliza su mandato constitucional, durante una entrevista con la televisión brasileña.
“Seguro hasta el 27 de enero de 2010, que termina mi mandato. Sin embargo la posición mía es salir lo más pronto posible, lógicamente con el respaldo del gobierno de Brasil”, declaró el jueves por la noche en comunicación telefónica con el canal Globo.
Zelaya se encuentra refugiado en la embajada brasileña en Tegucigalpa desde el 21 de setiembre, y su futuro es completamente incierto, especialmente luego que el Congreso hondureño rechazara restituirlo en el poder para que culmine su mandato.
“Él tiene plena conciencia que al terminar su mandato, él deberá seguir otro destino”, aseguró por su parte el encargado de negocios de la embajada brasileña en Tegucigalpa, Francisco Catunda.
El jueves, Zelaya manifestó que desistió de abandonar su encierro en la embajada de Brasil para viajar a México porque el régimen de facto hondureño quería obligarlo a que “renunciara” al poder.
Brasil, que criticó la negativa del régimen de facto de Roberto Micheletti a concederle un salvoconducto a Zelaya, ha encabezado el grupo de países latinoamericanos que rechazan las elecciones del 29 de noviembre en Honduras y siguen reconociendo a Zelaya como presidente.