Hasta las afueras de la productora Time For Fun (T4F) en calle La Concepción de Santiago, llegó esta tarde un grupo de 15 fanáticos de la banda estadounidense Metallica, para reclamar por el alto precio al que se venden las entradas para el concierto que ofrecerán en Chile.

Estos fluctúan entre 30 a 90 mil pesos, lo que sumado a la advertencia del intendente metropolitano Igor Garfulic de suspender el evento por no estar autorizado, motivó a los jóvenes a protestar frente a las oficinas de la productora.

Según los seguidores de la agrupación musical, si los valores de admisión son tan altos, exigen que por lo menos la presentación tenga la misma calidad de las que se realizan en EEUU o Europa.

El concierto de Metallica está previsto para este 26 de enero en las pistas del Club Hípico de Santiago, recinto que ha sido cuestionado anteriormente debido a las escasas comodidades y medidas de seguridad para este tipo de eventos masivos.