Decenas de miles de australianos reclaman ante la justicia el reembolso de millones de dólares a sus bancos por costos que consideran abusivos, en el marco del recurso colectivo más importante de la historia del país, que empezó este lunes en Melbourne.

El gabinete de abogados Maurice Blackburn representa a 43.500 clientes del banco ANZ, que estiman haber abonado gastos bancarios excesivos. Se trata del primer proceso de esta acción colectiva (“class action”), que reagrupa en total a 185.000 demandantes.

Los abogados argumentaron que los gastos bancarios por atrasos en pagos o descubiertos son desorbitados y se asimilan a multas injustas más que a la facturación de costes acarreados de verdad a la entidad.

“Puedes estar en números rojos por un dólar o tener un día de atraso en tu pago y los bancos te infligen unos gastos que no tienen estrictamente nada que ver con los que sufren realmente por esa minúscula transgresión”, declaró Andrew Watson, del gabinete Maurice Blackburn.

Por los descubiertos, el banco facturaba entre 25 y 35 dólares australianos (entre 23 y 32 dólares, 17 y 24 euros).

ANZ, uno de los cuatro grandes bancos australianos, es la primera de las ocho entidades que comparecen ante el tribunal en el marco de este caso.

Los otros bancos denunciados por sus clientes son BankSA, Bankwest, Citibank, Commonwealth Bank of Australia, National Australia Bank, St George y Westpac.

Esta acción colectiva está financiada por Bentham IMF (Australia), fondo especializado en recursos masivos.