A estas alturas, a nadie parece sorprender que haya gente que crea en la teoría de que la Tierra es plana. Los numerosos sitios web dedicados al tema y las reuniones de los terraplanistas van en aumento.

Pero detrás de este fenómeno se esconde una verdad tal vez más escalofriante: es posible que la de los terraplanistas no sea la teoría más descabellada acerca de nuestro planeta.

A continuación, una lista con esas teorías cuyos defensores se mantienen firmes en la lucha por abrirnos los ojos.

Vaya una advertencia al lector: las siguientes líneas contienen geocentrismo, domos gigantes, campos electromagnéticos y asombrosas historias de una voluntad a prueba de burlas. Y a prueba de ciencia.

1- La Tierra es hueca

Hay quienes han levantado la voz en contra de quienes insisten en que la tierra es plana. Uno de ellos es Rodney Cluff, quien afirma que “los terraplanistas están obviamente equivocados. El mundo es una esfera, y es hueca”.

De esta manera, Cluff, autor del libro World Top Secret: Our Earth Is Hollow!, explica que en realidad todos los que participan de la discusión de moda están equivocados, porque nuestro planeta es hueco.

Pero Cluff ha recibido el testimonio de parte de una larga serie de personajes que han luchado por mostrar la verdad al mundo. En un completo artículo en el Telegraph, el periodista Will Storr se adentró en la profundidades de esta teoría.

En el siglo XVIII, el astrónomo Edmond Halley creía que las lecturas inusuales de las brújulas se producían debido a la composición del planeta: un cascarón vacío, y dos cascarones concéntricos y un núcleo del diámetro de Venus, Marte y Mercurio, respectivamente.

En el siglo siguiente, el teórico de la Tierra hueca más connotado fue John Symmes, veterano de la guerra anglo-americana de 1812. Symmes escribió un panfleto: “Declaro que la Tierra es hueca y habitable en su interior, conteniendo un número de esferas concétricas sólidas, una dentro de la otra, y que está abierta en los polos en 12 o 16 grados”.

Pixabay (CC0) Pexels
Pixabay (CC0) Pexels

Symmes dedicó su vida a convencer a otros de sus ideas. Incluso presentó una petición de fondos al Congreso norteamericano para realizar una expedición al interior de la Tierra para contactarse con las razas de la gente del interior. Su moción fue denegada.

En nuestros días tenemos a Cluff, cuya fascinación por esta teoría comenzó a los 16, cuando por casualidad escuchó a alguien hablando sobre el tema. Desde entonces, afirma, ha intentado organizar expediciones hacia el interior del planeta.

La última de ellas data de 2003, cuando fue contactado por un hombre llamado Steve Currey, quien había leído el libro de Cluff. Cuando recibió como herencia familiar una agencia de viajes, decidió usarla para organizar la expedición.

Luego de años de trabajo, habían conseguido un rompehielos nuclear ruso usado para transportar turistas al Polo Norte. Empezaron a reclutar miembros. “Steve cobraba 26 mil dólares (17 millones de pesos chilenos) por un puesto en el viaje y ya tenía 40 interesados”, asegura Cluff.

Pixabay (CC0) Pexels
Pixabay (CC0) Pexels

Pero entonces a Currey le detectaron seis tumores inoperables en el cerebro. Justo antes de que tomaran el vuelo hacia el Polo, murió. La expedición fue cancelada. A partir de entonces Cluff trató de reorganizar la operación, pero nunca pudo reunir el dinero y además se produjeron otras muertes entre los miembros de su equipo.

“Parecía como si hubiera una fuerza tratando de evitar que esto pasara”, confiesa Cluff. “Creo que son los bancos internacionales. Ellos no quieren que la gente del interior de la Tierra se meta con sus esclavos, aquí en el mundo externo”, sostuvo.

Como testimonio de los intentos de Cluff y sus seguidores, Voyagehollowearth.com, el sitio web que promocionaba el sitio, permanece inalterado. Allí se puede ver el itinerario, información acerca de otros exploradores y más información al respecto, además de un mensaje en memoria de Steve Currey:

“Nuestros corazones y oraciones están con la familia Currey por el fallecimiento de Steve Currey. Él vivió como todos deberíamos hacerlo y será profundamente extrañado. Te extrañamos, Steve… Como resultado, este sitio ha sido cerrado y todos los futuros viajes han sido cancelados. Para más información acerca de este sitio por favor contáctenos en info@voyagehollowearth.co

2- Los ovnis son alucinaciones provocadas por los terremotos

Después del último terremoto en México, en septiembre del año pasado, muchas personas reportaron en las redes sociales el avistamiento de luces sin explicación aparente. ¿Ovnis? De acuerdo a esta teoría, no correspondería a vida alienígena.

En 1975, el neurólogo y profesor universitario Michael Persinger presentó su Teoría de la Tensión Tectónica. Según esta, fenómenos geológicos como los terremotos generan campos electromagnéticos de gran intensidad que causan alucinaciones en el lóbulo temporal basadas en imágenes imperantes en la cultura de cada momento histórico, lo que explicaría la prevalencia del avistamiento de ciertas visiones en determinados períodos de la historia.

Según Persinger, los avistamientos y encuentros con ovnis se explican por movimientos de la corteza terrestre altamente localizados que, aun cuando no involucran un terremoto, sí generan el campo electromagnético. Es decir, se trataría de alucinaciones provocadas por ese fenómeno.

Representación de dos naves alienígenas | maxime raynal (CC0) Pexels
Representación de dos naves alienígenas | maxime raynal (CC0) Pexels

En 1995, el periódico británico The Independent publicó una nota en la que presentaba los últimos estudios de Persinger, quien afirmaba que las experiencias religiosas y místicas pueden ser inducidas por la estimulación eléctrica del cerebro. Para ello diseñó un casco con electrodos, llamado el God Helmet (Casco de Dios). A pesar de su nombre rimbombante, las evidencias nunca han sido concluyentes.

La teoría no tiene mucho seguimiento a nivel mediático. Por ejemplo, el diario español El País consultó a Emilio Carreño, el director del Instituto Geológico de España, acerca de aquellas misteriosas luces que aparecieron en México. Según el experto, “la fricción de las rocas puede producir en su superficie corrientes eléctricas por el flujo de iones que genera”.

3- La Tierra está fija y es el centro del universo

Si esto te suena como algo que hace muchos años aprendiste en el colegio, es porque así fue. Y también te enseñaron que la teoría geocéntrica, según la cual la Tierra es el centro del universo, fue reemplazada por la heliocéntrica, que dice que el centro es, en realidad el Sol, aunque solo de un grupo de planetas, y que la Tierra es uno más de lo que giran a su alrededor.

Pero la teoría de la tierra fija viene a decir que no es así. A pesar de las dificultades por las que pasaron Copérnico y Kepler para que la superáramos, esta idea sigue inamovible en las creencias de miles de personas, tan inamovible como nuestro planeta en su rol de centro del universo.

Es cierto que el modelo geocéntrico de Tolomeo fue aceptado y utilizado durante unos 1.500 años, pero entonces pasó lo que suele ocurrir en estos casos: la ciencia. Galileo, junto con los dos héroes antes mencionados, demostraron que es la Tierra la que gira alrededor del sol.

Representación del Sistema Solar | Andrew Caw (CC) Flickr
Representación del Sistema Solar | Andrew Caw (CC) Flickr

¿Por qué esta teoría se resiste a morir? El sitio Fixed Earth Theory explica la cosmología actual escode un plan anti-Biblia disfrazado como “ciencia” (las comillas son del sitio). Además afirma que corrientes como el Copernicanismo y el Big-bangismo son mentiras sin hechos que los comprueben, las que han plantado el nefasto virus del evolucionismo en cada aspecto del saber humano acerca del universo, la Tierra y el hombre.

Junto a la imagen de un globo terráqueo flotando entre lo que parecen ser dos magnetos, se lee lo siguiente: “El globo levitando mostrado a la izquierda tiene un electromagneto y un sensor escondido en su soporte, lo que provoca que la Tierra levite inmóvil en el aire. ¿Pudo Dios haber diseñado algo así para la Tierra real? La Biblia y toda la evidencia real confirman que eso es justamente lo que hizo: La Tierra no está rotando… ni está girando alrededor deol”.

4- La Tierra sí es plana… pero está cubierta por un domo gigante

Esta particular variante del terraplanismo incluye el elemento conspirativo en su máxima expresión. El sitio Enclosed World, el principal promotor de esta teoría, recibe a sus visitantes con una promesa: Estás a punto de ver el mundo con nuevos ojos.

¿Es posible que estemos viviendo en una estructura del tipo Truman show, con miles de millas de ancho? Es la pregunta que el sitio nos plantea y que, acto seguido, no duda en contestar.

Como reporta Express, la web es administrada por Mark Sargent, un especialista en IT de Boulder, Estados Unidos que en 2014 conoció el terraplanismo y no dudó en calificarlo como la conspiración más estúpida de la historia.

Sargent inició entonces sus propias investigaciones y, oh, sorpresa, llegó a la conclusión de que la Tierra no solo es plana, sino que además está cubierta por un domo gigante, tan alto y ancho que no es posible verlo a simple vista.

enclosedworld.com
enclosedworld.com

Por supuesto, esto incluye la imposibilidad de los viajes espaciales, por lo que aquí nos encontramos con la conspiración dentro de la conspiración (algo así como una conspiraception).

En una serie de videos (se pueden encontrar recopilados en el sitio Pinecone Utopia), Sargent afirma que cuando en 1950 comenzó la exploración espacial, se encontraron con el enorme domo. Entonces se iniciaron las pruebas nucleares para tratar de destruirlo y así cumplir con el sueño de llegar a las estrellas. Pero cuando esto no resultó, las autoridades decidieron cubrir los hechos con imágenes trucadas y un falso viaje a la luna.

Acerca de los fabricantes del domo y de sus objetivos, no hay demasiados datos. Pero esto no inhibe a sus seguidores, con quienes tuvo la posibilidad de encontrarse en la Flat Earth International Conference de noviembre pasado, en Estados Unidos, en la que participó como expositor. Sargent ya está confirmado para la versión 2018 del encuentro. Aún quedan entradas disponibles.