Más de un año lleva clausurada la empresa de áridos que se ubica en el sector Lonco en Chiguayante, lo anterior luego de que los vecinos del lugar reclamaran por los incumplimientos de la cantera en relación a las normas ambientales y pago de permisos, lo que llevó al municipio a cerrarla.

El caso llegó hasta la Superintendencia de Medio Ambiente, la que resolvió que la cantera debía presentar un cronograma para solucionar algunos problemas graves al interior de las faenas de extracción, los que incluso ponían en riesgo a la población cercana.

La empresa solicitó ampliar el plazo que la SMA les había dado además para presentar una Declaración de Impacto Ambiental, de 6 meses a un año. Lo que fue rechazado por el organismo, obligando a la cantera a someterse a un Estudio de Impacto Ambiental para poder seguir operando, en caso de que éste resulte favorable.

Los vecinos de Lonco se mostraron satisfechos tras el mandato de la Superintendencia de Medio Ambiente, señaló uno de sus representantes, el abogado Felipe Urbina.

Una vez notificada la empresa, cuenta con 120 días para iniciar los trámites y un plazo de 15 meses para completar la presentación del Estudio de Impacto Ambiental en el SEA.

Con esta resolución de la SMA se confirma que Canteras Lonco debe regirse por la actual normativa y no por cláusulas de la Ley Minera de la década de 1930, confirmando además que la prohibición de funcionamiento y clausura se mantienen hasta que la autoridad ambiental tome una decisión respecto del Estudio, explicó el abogado.

Tras la publicación de esta nota, Canteras Lonco envió un comunicado, indicando que no es efectivo que la empresa haya fallado en su Programa de Cumplimiento, aprobado el 22 de diciembre de 2015.

Además, sostienen que la resolución es una respuesta a una petición efectuada por la propia empresa para poder ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental a través de un Estudio de Impacto Ambiental, como una alternativa para evaluar el proyecto.