El contralor general de la República, Jorge Bermúdez, este lunes abordó diversos temas coyunturales en los cuales de una u otra manera ha estado involucrado el organismo fiscalizador. Uno de los ámbitos que el abogado comentó en entrevista con nuestro medio asociado CNN Chile es que en los próximos días presentará la auditoría realizada a la Dirección de Previsión de Carabineros, la que calificó como “pésima”.

En la fiscalización se revelan una serie de asignaciones que no corresponden a la realidad funcionaria de las personas, como por ejemplo, nominar a funcionarios cerca de retirarse en zonas extremas, para abultar las cifras que recibirán como pensión.

Además, Bermúdez detalló que existen civiles que han obtenido pensiones bajo este sistema sin jamás haber trabajado al interior de la institución, e incluso recibiendo montepíos sin haber estado casados.

Consultado sobre por qué sucedió esto, el titular del organismo fiscalizador explicó que se dio “por un uso abusivo de la normativa, por aprovechamiento, por falta de control. Todo esto es corrupción, por supuesto”.

Además, advirtió que probablemente esta situación se judicializará ya que probablemente los beneficiarios de las pensiones presentarán un juicio en contra del informe emitido por la Contraloría.

El contralor indicó, además, que aún no encuentra explicación para que el organismo no haya detectado con anterioridad el millonario fraude en Carabineros, por lo que señaló que al menos 2 funcionarios de la Contraloría fueron desvinculados por su responsabilidad.

Sin embargo, fue claro en señalar que Contraloría sí “estuvo ahí”; refiriéndose a que hizo su trabajo, pero a partir de denuncias que estaban mal hechas.

“Uno se pregunta: ¿Dónde estuvo la Contraloría? La Contraloría estuvo, pero no detectó el fraude (…) No lo detectó porque, en su momento, recibió denuncias que estaban mal hechas y que por lo tanto no fueron atendidas debidamente”, detalló.

Pese a ello, realizó una autocrítica sobre el rol que jugó el organismo que dirige en dicho proceso. “Lo que se produce es esa situación de familiaridad que se comienza a producir entre el auditado y el auditor y eso yo creo que fue el gran error de la Contraloría, que se empezó a hacer la vista gorda en algún momento de lo que ocurría ahí”. De todos modos, descartó que actualmente exista corrupción en la institución, aunque insinuó que hacia atrás podría haber existido.

Advertencia al gobierno de Piñera

Otro de los temas por los cuales fue consultado es cómo fiscalizará al actual gobierno que preside Sebastián Piñera y dónde pondrá el foco durante esa labora.

“Lo que yo he visto hasta ahora, lo que está tratando de hacer este gobierno es impulsar, por ejemplo, una agenda de inversiones. Y eso significa que algo que se ve como burocracia que en realidad para nosotros son procedimientos, se quieren a lo mejor acelerar o incluso puede haber la tentación de saltarlos y, por lo tanto, puede haber ahí algún inconveniente desde el punto de vista de cumplir con los requisitos que se establecen en la legislación”, afirmó Jorge Bermúdez.

En ese contexto, señaló que realizó una advertencia al gobierno entrante por los eventuales conflictos de interés que puedan generarse.

“Nosotros tuvimos en la Contraloría una reunión con todos los que iban a ser ministros y subsecretarios, y yo les dije que en Chile el problema de la corrupción probablemente no eran las coimas o los sobornos, sino que los conflictos de intereses y que nosotros ibamos a poner mucho ojo ahí”, aseveró.

Horas extra en municipios

Durante la entrevista también se abordó el mal uso que se le ha dado al pago de horas extraordinarias en diversos municipios a lo largo del país. La figura, en muchos casos, consiste en que hay trabajadores que supuestamente realizan más de 50 horas extra al mes, lo que implicaría que tengan jornadas laborales de al menos 57 horas semanales, y en algunos casos superan las 100 horas extraordinarias al mes, es decir, un promedio de 70 horas de jornada laboral por semana.

En gran parte de esos casos la Contraloría detectó que en realidad estas horas fuera de la jornada normal se inventaban y/o abultaban artificialmente para aumentar de forma injustificada las remuneraciones de los funcionarios, tal como publicó la Unidad de Investigación de Radio Bío Bío a fines del año pasado.

Bermúdez aseguró que, pese a que el año pasado el ente contralor realizó más de 400 auditorías a distintos municipios que derivaron en sumarios y denuncias al Ministerio Público, por el cobro indiscriminado de horas extra, no puede dar fe de que este tipo de malas prácticas no se continúen realizando.

“Siguen haciendo lo mismo porque nosotros no tenemos la facultad de sancionarlos y porque son malas prácticas que están muy, muy enraizadas en estas instituciones”, lamentó el contralor, y agregó que probablemente los alcaldes saben que esto sucede, pues, a su juicio, es la única manera en que esto se pueda producir.

También cuestionó que “claramente es un sobresueldo injustificado porque, además, la gestión no es mejor. Eso uno lo ve. No hay mejores servicios públicos”.