Desde su exitoso paso por la serie That ’70s Show, en la que caracterizó a un despistado y simpático Michael Kelso, el reconocido actor Ashton Kutcher comenzó a cimentar una sólida carrera gracias a sus cómicas actuaciones.
Ya sea en películas como Hey, ¿dónde está mi auto? y Recién Casados, o en sitcoms como Two and a Half Men y The Ranch, Kutcher se acostumbró a sacarnos más de una risa con sus extrovertidas caracterizaciones.
Pero lo que muy pocos saben es que detrás de esa alegría que la estrella de Hollywood irradia en la pantalla se esconde un secreto sumamente delicado.
Además de su hermana mayor Tausha, Ashton tiene un hermano mellizo llamado Michael, el que nació con serios problemas de salud y pesando apenas 4 libras (Ashton pesó 10.5). Poco antes de entrar al jardín Michael fue diagnosticado con una parálisis cerebral producto de deficiencias neurológicas irreversibles.
A través de su niñez, el hermano de Ashton debió lidiar con diferentes problemas médicos relacionados con el habla, la vista y con el desarrollo de las habilidades motoras, aunque lo más grave era su cardiopatía.
“No quería volver a casa y enterarme de nuevas malas noticias sobre Michael”, indicó alguna vez Ashton según consignó el sitio especializado Movie Pilot.
Con el tiempo la condición de Michael empeoró, y las posibilidades de sobrevivir sin un trasplante de corazón disminuyeron considerablemente. Cuando el actor tenía 13 años visitó a su hermano en el Hospital de la Universidad de Iowa, y se enteró de que se mantenía con vida con la ayuda de un respirador mecánico aunque sólo podría continuar así por 48 horas. Si en ese tiempo no aparecía un donante, Michael moriría.
Lo primero que Kutcher pensó en hacer fue sacrificar su vida para que su hermano pudiera seguir viviendo con su corazón. En 2005 revivió la experiencia: “Estaba sentado en el balcón, pensado en lanzarme al vacío, hasta que de pronto llegó mi papá y me preguntó en qué pensaba. Cuando le conté me respondió: ´tú no puedes hacer eso´”.
Fue justo ahí cuando los médicos les avisaron que una mujer había fallecido en Florida en un accidente de tránsito, y que su corazón venía en camino.
Finalmente la cirugía resultó exitosa, y desde entonces cada vez que los hermanos hablan por teléfono o chat, se despiden con un “Te amo”.
“Ashton nunca salió de mi lado”, dijo Michael a la revista People para relatar la devoción de su hermano durante el procedimiento. “Me mostró el amor que un hermano tiene para otro”, señaló.
