El príncipe William y la duquesa de Cambridge, acompañados de sus hijos George y Charlotte, llegaron este sábado a Canadá, para realizar una visita oficial donde recorrerán los extensos territorios canadienses.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y su esposa Sophie Grégoire Trudeau, fueron los encargados de recibir a la familia real en en el aeropuerto donde además les rindieron honores militares y 21 tiros de cañón en el fresco otoño.
Como es costumbre cada vez que aparecen en público, fueron los pequeños príncipes quienes se robaron toda la atención de los medios que los esperaban impacientes y que incluso recibieron el saludo de George de tres años.
Trudeau, en tanto, no tuvo la misma suerte, pues cuando se acercó a George para saludarlo chocando palmas, el niño negó con la cabeza, sin soltar la mano de su padre.
Luego la autoridad intentó darle la mano, pero tampoco fue aceptaba por el menor de edad. Finalmente el Primer Ministro se dio por vencido, y la familia continúo con la visita.
La pareja real se aloja en una lujosa mansión, hogar del gobernador general, representante de la monarquía británica en Canadá.
Cinco años después de su primer viaje a Canadá durante su luna de miel, los duques recorrerán durante ocho días los paisajes de la costa canadiense en el Pacífico, hasta Yukon en el norte, con actividades en comunidades amerindias o pobres.
George, y la pequeña Charlotte, de 16 meses, están bajo el cuidado de su niñera en Victoria, capital de Columbia Británica en la isla de Vancouver.
El domingo en Vancouver, William y Kate junto a Trudeau y su esposa hicieron un recorrido por un centro de acogida de refugiados y de niños con retraso mental.
Mira aquí las imágenes
