Uno de los mejores recuerdos que dejará la Copa América 2015 que se organizó en Chile. Así algunos se atreven a tildar la irrupción de la denominada Tarjeta Verde, que en cada partido de nuestra selección fue alzada por el público durante la entonación del himno del equipo rival.

Primero vino el turno Ecuador, en el inicio del certamen. Después México, en el preámbulo de ese recordado 3 a 3. Y finalmente Bolivia, la primera prueba de fuego para los asistentes que colmaron el Estadio Nacional el 19 de junio.

Pese a algunos pronósticos pesimistas, que echaban mano a las históricas disputas territoriales con el país vecino, la gente respondió y una vez más levantó la colorida cartulina mientras los futbolistas contrarios cantaban su canción nacional.

El respeto, como pocas veces en Chile y Sudamérica, se impuso.

¿Dónde nace la Tarjeta Verde?

Lo que hoy a muchos chilenos y extranjeros asombra, es común para los niños que participan de la liga deportiva de la ONG Fútbol Más, que instauró el uso de la Tarjeta Verde en sus encuentros semanales que actualmente se llevan a cabo en más de 60 locaciones vulnerables de Chile, Perú, Ecuador y Haití.

Fútbol Más es una organización que nace en 2008 con la misión de internarse en barrios estigmatizados y con tradición conflictiva para, a través de talleres futbolísticos, inculcar en niños y jóvenes valores más allá de lo meramente competitivo.

Así, de paso, aprovechan de potenciar la actividad en las poblaciones y alejar un poco a los menores de vicios y actividades delictuales. Es el uso del fútbol como agente conciliador y de resiliencia, dicen los organizadores.

Como en todo partido, quienes infringen las normas pueden verse sometidos a la rigurosidad de un castigo en cancha o fuera de ella. La diferencia es que Fútbol Más se propuso buscar una forma de premiar los buenos ejemplos durante el juego y así fue cómo surgió la Tarjeta Verde.

Fútbol Más

Fútbol Más

Alfredo Chavarría, coordinador de la liga de Fútbol Más en la región del Bío Bío, explica que el reglamento hoy sanciona y destaca únicamente el gol, o los goles, sin tomar en cuenta la serie de factores que se coordinan para llegar al momento más esperado de un choque entre dos escuadras.

“Difícilmente se habla del pase, de cómo comenzó la jugada. La Tarjeta Verde busca resaltar cada acción, sobre todo el respeto por los valores. Resaltar todo lo positivo que debes destacar en un niño, decirle que lo que hizo, vale”, detalla.

De esta manera, los niños involucrados en el espectáculo más que escabullirse de una amarilla o una roja, harán todo lo posible por conseguir una verde, que es mostrada por el árbitro en mérito de un esforzado desborde o un toque entre líneas.

Incluso por reconocer al rival o prestarle ayuda. Hasta las barras están habilitadas para recibir tarjetas verdes si alientan constantemente, con creatividad y sin insultos.

Cada cartulina ayuda a la hora de proyectar el avance del equipo a las rondas finales pues agrega puntaje. En suma, es el mayor reconocimiento que la liga barrial otorga a los que desde temprana edad ya se desviven por el balompié.

Un préstamo

“Estamos muy contentos porque la Tarjeta Verde llegó a cuartos de final. Ha sido un trabajo muy arduo, pero la respuesta ha sido genial, ha sido muy buena”, comentó en la antesala del Chile-Uruguay la encargada de comunicaciones de Unicef en nuestro país, Francisca Palma.

El organismo de Naciones Unidas se encuentra en una campaña que calzó perfecto con la copa y que lleva por nombre ‘América nos une, no hagas tú la diferencia’. Para potenciarla, se establecieron lazos con Fútbol Más y emergió la idea de tomar la Tarjeta Verde para darle un nuevo uso.

“La Tarjeta Verde es de nuestros aliados de Fútbol Más, que trabajan en las canchas de los barrios en Chile y en otros países de la región y ellos usan la Tarjeta Verde en señal de respeto para enseñarle a los niños de las buenas acciones”, añade Francisca.

Asimismo cuenta que “ellos nos prestaron la tarjeta para que nosotros la lleváramos a otro lugar, que es el Estadio Nacional, y para que invitáramos a los chilenos a respetar y a mostrar la Tarjeta Verde a nuestros rivales futbolísticos en señal de respeto”.

“Hoy la Tarjeta Verde, me atrevería a decir, va a ser un gran recuerdo de la Copa América organizada en Chile”, cierra la portavoz. Y puede que no se equivoque.