Fue en un avión KLM directo desde Fráncfort en el que arribó hasta la loza del aeropuerto de Pudahuel el canciller Heraldo Muñoz y parte de la comitiva que representó a nuestro país en La Haya, en el marco de los alegatos orales que tanto Chile como Bolivia protagonizaron ante la Corte Internacional de Justicia.

En sus primeras palabras tras regresar al país, Muñoz señaló que el balance hecho es sumamente positivo, ya que han sido sido muy rigurosos para defender los intereses nacionales frente a la demanda marítima boliviana, dijo.

Ahora, agregó el secretario de Estado, resta esperar con serenidad la decisión de los jueces sobre la jurisdicción del tribunal internacional.

Asimismo, el jefe de la diplomacia nacional sostuvo que el equipo de Bolivia no contestó las preguntas que Chile planteó en sus alegatos y tampoco la del juez Christopher Greenwood, en torno a la fecha del pretendido “acuerdo” argumentado.

Por su parte, el agente chileno para la demanda, Felipe Bulnes, indicó que la defensa de nuestro país se basa en pilares muy sólidos para resguardar asuntos de interés global, como lo es el respeto a los tratados de limites entre las diferentes naciones.

Ambos agradecieron la expresión de unidad nacional que, remarcaron, se evidenció en la corte con la presencia de representantes del Congreso.