Una nueva querella por tres delitos, que tiene como protagonistas a los controladores del holding Penta, Carlos Lavín y Carlos Délano, fue admitida el sábado tras ser ingresada un día antes ante el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago.

Se trata de una acusación por asociación ilícita, estafa y apropiación indebida reiterada, presentada por Jorge Charbín, socio minoritario de la vidriera PH Glass, perteneciente al Grupo Penta.

La acción también apunta al ex gerente Hugo Bravo y a Horacio Peña.

Charbín acusa la existencia de una estructura para cometer los delitos señalados y así enriquecerse a través de Penta Capital de Riesgo.

Según fue explicado, en 2005 Penta adquirió el 70% de las acciones de la vidriera y en 2009 el holding pasó a tener el 99% de la empresa. Su ex dueño alega que hubo pagos innecesarios y servicios inexistentes.

Si se comprueban los delitos que se acusan, los dueños de Penta arriesgan hasta 20 años de presidio.

El abogado del querellante, el ex fiscal Alejandro Peña, indicó que “nuestro cliente fue engañado, inducido a error, al efecto de suscribir una sociedad con Penta Capitales de Riesgo, por tanto, al año de funcionamiento, se efectuaban gastos por servicios inexistentes”.