El Consejo de Defensa del Estado (CDE) inició acciones judiciales para solicitar a los familiares de Augusto Pinochet definirse sobre si aceptan o no la herencia, que además de dinero, incluye deudas pendientes del fallecido dictador

El CDE se presenta como “acreedor” sobre una deuda de más de 2.400 millones de pesos (más de cuatro millones de dólares) en concepto de impuestos de primera categoría adeudadas “por el difunto contribuyente Augusto Pinochet Ugarte”, consigna El Mercurio.

Además, también tendría pendiente un eventual “crédito contra los herederos por inminente impuesto a la herencia que afectaría a asignaciones hereditarias”.

La indagación judicial iniciada en 2004 arrojó que los fondos ocultos en cuentas en el exterior ascendían a 21 millones de dólares. De ellos, 3,4 millones fueron legalmente justificados por Pinochet, mientras que 17,8 millones no fueron comprobados y se desconoce su origen, indicó el comunicado judicial.

Por esto el Séptimo Juzgado Civil ya ordenó a todos los herederos (su esposa Lucía Hiriart, que recibió el 51,8%, sus cinco hijos, que obtuvieron un 7,14%, y 12 de sus 25 nietos beneficiados, así como 5 bisnietos que se repartirían un 12,5%) que se pronuncien en un plazo de 40 días.

Según el diario El Mercurio, Lucía Hiriart ya afirmó aceptar la herencia con beneficio de inventario, lo que implicaría responder a las deudas del fallecido no extintas con su muerte con los bienes hereditarios y hasta la cantidad que reciba de herencia, pero no con sus propios bienes.

De sus cinco hijos, Augusto y Marco Antonio habrían aceptado la herencia con la misma figura. Sin embargo cuatro de los nietos habían solicitado un año al tribunal para decidir si aceptaban o no la herencia, algo que el CDE rechaza.