Una oleada de denuncias por cuestiones de género ensombrece este sábado la campaña electoral en Bolivia, a poco más de un mes de los comicios generales, en los que el presidente Evo Morales se presenta con ventaja para un tercer mandato hasta 2020.

Las acusaciones involucran a los principales postulantes a la presidencia en las elecciones del 12 de octubre que, según sondeos independientes, encabezan Morales (56%) y el empresario Samuel Doria Medina (17%), su principal rival.

La discusión de los programas de gobierno de los candidatos quedó relegada a un segundo plano, por denuncias de supuesta discriminación contra la mujer que salpican a Morales y a Doria Medina.

El audio subrepticiamente grabado de una amenaza de Doria Medina a la esposa de uno de sus candidatos al Congreso, Jaime Navarro, desató acusaciones de machismo y violencia de género.

“Es una grabación de hace dos años, donde había una familia de amigos en problemas”, explicó Doria Medina a periodistas, respecto al audio en el que la mujer se queja por las golpizas de su esposo.

Ante las denuncias de violencia doméstica de la esposa del candidato a senador, que llegaron a la prensa hace algún tiempo, Doria Medina amenaza: “si insistes con tus abogados con tus huevadas (…), vas a ser destinada a Trinidad”, a una de las empresas de su propiedad.

Cuando la mujer le replica que por sus denuncias públicas otro candidato de su lista, Arturo Murillo, también le amenaza replica: “lastimosamente no tiene mucha cabeza, no es un mal tipo, pero no tiene cabeza”.

Otro audio donde Morales entre otras cosas se regodea por el rédito político que logró con la organización de la cumbre del G77+China en julio en Santa Cruz, también generó polémica.

El motivo es que en la misma grabación, cuya autenticidad no fue confirmada, Morales hace también alusiones discriminatorias contra las mujeres, a las que acusa de “masoquistas” porque supuestamente son condescendientes cuando son golpeadas por sus maridos.

El candidato opositor Mario Orellana, quien divulgó la grabación, fue curiosamente encarcelado poco después por otro caso de 2011 relacionado con supuestas irregularidades en sus funciones públicas.

Ante este cuadro, la diputada disidente de Morales y actual dirigente del opositor Movimiento Sin Miedo (MS), Rebeca Delgado, pidió a Morales y Doria Medina la renuncias a sus candidaturas.

“Deben renunciar todos los candidatos que tienen relación esencialmente con hechos de violencia a la mujer”, pidió.

El debate coincide con una situación de alarma en el país por el asesinato violento de 60 mujeres en lo que va del año.

Bolivia es el país latinoamericano con el nivel más alto de violencia física contra las mujeres y el segundo después de Haití en violencia sexual, según el Programa ONU-Mujeres.