Incomodidad y molestia causó en O’Higgins de Rancagua que Jorge Sampaoli no liberara de los entrenamientos de la selección a Paulo Garcés y Pablo Hernández, para que ambos disputaran la definición de la Supercopa chilena ante Deportes Iquique, este sábado en San Carlos de Apoquindo.
En rueda de prensa, el técnico celeste, Eduardo Berizzo, no quiso dramatizar, pero apuntó contra la ANFP.
“Somos coherentes porque la selección para nosotros es prioridad y toda cesión de futbolistas siempre significa un orgullo y satisfacción. Es claro que el calendario conspira en este caso contra nuestra organización, pero hemos sido partidarios de aportar a la selección. Ojalá ambos accedan a la Copa del Mundo”.
Quien si mostró su disgusto fue el volante ‘minero’ Braulio Leal, quien en su cuenta de Twitter fustigó que “es una falta de criterio tremendo que (Paulo) Garcés y el Tucu (Pablo Hernández) no puedan jugar una final!!! (…) lamentablemente el jugador siempre es el jamón del sándwich!!!!”.
“Cuál es la diferencia que se presenten un día después y así poder jugar la final. Esa es la falta de criterio”, añadió.
Otro que sacó el habla fue el defensor Yerson Opazo, quien expuso que “cuando los líderes que conducen el buque no tiene la experiencia de ser jugador, es muy difícil tener criterio pro jugador”.
