Con ocho buzos en total, tanto de la Armada como de la PDI, hoy se reanudó la búsqueda de vestigios del Cessna 172 extraviado tras despegar de Isla Mocha el año pasado con cinco ocupantes. Ayer los buzos de la Armada no encontraron indicios luego de revisar el fondo marino a 30 metros de profundidad, en uno de los puntos donde pescadores encontraron restos metálicos.

Entre buzos de la Armada y de la PDI, estos últimos del Equipo de Operaciones Subacuáticas Metropolitana, son ocho los especialistas que desde hoy miércoles revisarán el fondo marino para intentar dar con otros restos del Cessna 172, desaparecido en octubre del año pasado con cinco ocupantes.

Ayer martes sólo los cuatro buzos de la Armada lograron sumergirse, en dos turnos, aunque sin éxito.

El rastreo tiene limitaciones de visibilidad y tiempo, porque a 30 metros de profundidad los buzos pueden permanecer media hora como máximo para no sufrir el mal de presión, explicó el comandante Manuel Cofré, gobernador marítimo de Talcahuano.

El comandante Cofré aclaró que el hallazgo en dos puntos no significa que haya más restos en los mismos lugares, porque los pedazos pudieron ser arrastrados por las fuertes corrientes que predominan entre Isla Mocha y Tirúa.

Mientras las trozos metálicos son analizados en el Laboratorio de Criminalísitica central de la PDI Metropolitana, la Fuerza Aérea confirmó que prestará apoyo a las tareas que lidera el Ministerio Público con aeronaves de sobrevuelo y traslado de personal de búsqueda.