El diputado y ex presidente del Colegio Médico, Juan Luis Castro (PS), expresó que 2013 se “va con una enorme deuda y con problemas en la salud pública chilena”, agregando que “se comprobó que nunca se pudo terminar con las listas de espera AUGE, como se había prometido a principios del gobierno de Sebastián Piñera, y se terminó sin una reforma al sistema privado de salud”.

El legislador de oposición expresó que “la reforma al sistema de salud privado no ocurrió, no por problemas del Congreso, sino porque la reforma que introdujo el gobierno fue fragmentaria, donde se introdujeron cuatro tarifas distintas en vez de tener una tarifa plana para los asegurados, y donde el IPC de la salud no era vinculante con los precios abusivos de las Isapres que todo el mundo conoce”.

Castro también dijo que en 2013 “la tramitación de la ley de medicamentos ha sido muy tortuosa, porque el Ejecutivo ha cambiado de ideas una y otra vez y no ha defendido el interés de los usuarios, sino más bien de los grandes consorcios que han buscado la venta en supermercados, cuando ni siquiera hay capacidad para fiscalizar la venta de remedios en farmacias”.

“En cuarto lugar -añadió- tenemos un déficit tremendo de especialistas que nunca lograron suplir. Hay 1.500 especialistas menos y por más que se hayan intentado hacer esfuerzos parciales, hoy el acceso a especialistas sigue siendo un drama para los usuarios de nuestro país; por lo tanto, es más el debe que el haber en materia de salud durante este 2013, y el ministro de Salud en vez de entenderse con la comisión respectiva de la Cámara de Diputados sólo se dedicó a descalificarla”.

Respecto al futuro gobierno, el diputado manifestó que “la presidenta electa Michelle Bachelet va a tener una enorme responsabilidad en asumir las deudas pendientes en materia de salud en Chile y regular para que el sistema público sea mucho más fuerte que el privado, con reglas claras para todos. Y que el sector privado de salud sufra una reforma estructural y profunda que lo haga ser solidario, que evite la discriminación por sexo y edad, y que logre que las deudas de los hospitales y la falta de especialistas en los hospitales sean por primera vez una solución concreta y no sólo las palabras como han sido en este período”.