El gobierno de Estados Unidos ya ha movilizado a personal y equipamiento militar para participar en las tareas de rescate en Filipinas, devastada tras el paso del supertifón Haiyan que ha dejado al menos 10.000 muertos, informó este domingo el Pentágono.

En el terreno se encuentra un equipo que está valorando la ayuda que Estados Unidos debe enviar a la población filipina, explicó en un comunicado el coronel Brad Bartelt, portavoz del Cuerpo de Marines.

Además, alrededor de 90 marines y tripulantes de la Tercera Brigada Expedicionaria y dos aviones Hércules KC-130J abandonaron el sábado Japón, dijo por su parte el coronel John Peck.

Gran parte del equipamiento enviado está destinado a participar en las tareas de rescate, señalaron ambos militares.

El Departamento de Defensa también ha movilizado dos aviones P-3 Orion, basados en Florida, que se encontraban en unos ejercicios de rotación en Misawa (Japón).

El presidente estadounidense Barack Obama y su esposa Michelle reconocieron el domingo estar “profundamente tristes” por los efectos de Haiyan.

Las autoridades estiman que el tifón ha dejado además 2.000 desaparecidos y que Leyte y Samar son las principales islas afectadas.