Los rebeldes sirios tomaron este martes el control de una base aérea estratégica, hasta ahora en manos del ejército, en la ciudad de Alepo, en el norte del país, tras varios meses de combates, indicó una ONG siria.

“Los combatientes del Estado Islámico de Irak y el Levante y otros grupos rebeldes tomaron de madrugada el control de la base de Mennegh”, indicó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).

Por su parte, la televisión estatal siria dio versiones contradictorias, diciendo primero que los “terroristas habían sufrido pérdidas enormes” y que en el “aeropuerto no había ni armas ni aviones” y luego que el ejército “resistía con éxito el asalto” enemigo.

Los rebeldes llevaban cerca de ocho meses luchando contra el ejército por esta base aérea, como parte de su estrategia para privar a las tropas del régimen del uso de aviones de guerra en la provincia de Alepo.

Los rebeldes iniciaron el asedio a Mennegh en diciembre de 2012 y han intentado lanzar el asalto “decenas de veces” antes de lograrlo, dijo la ONG con sede en Gran Bretaña.

El nuevo asalto se lanzó el lunes de madrugada, cuando un “hombre no sirio detonó su carga explosiva en un vehículo blindado en la entrada de la sede de la base aérea de Mennegh”, dijo.

El director del OSDH, Rami Abdel Rahman, dijo a la AFP que el suicida era saudí.

Tras la explosión, los yihadistas y rebeldes locales atacaron y destruyeron varios vehículos del ejército, mataron a oficiales y a soldados y tomaron el control del complejo, dijo la ONG.

Hace varios meses los rebeldes tomaron el aeropuerto militar de Al Jarrah y la Base 80, también en la provincia de Alepo.

El aeropuerto internacional de Alepo y las bases aéreas de Nayrab y de Kwayris siguen en manos del ejército.

Mennegh está situado en el al norte de la ciudad de Alepo, cerca de la frontera turca.