Por primera vez se está realizando en la Región de Atacama, una investigación canónica debido a las acusaciones que están afectando a dos sacerdotes que han cumplido labores en esta zona.

Una de ellas es por el presunto abuso de menores, en relación al sacerdote Casiano Rojas. Hecho que se habría producido cuando desempeñaba sus funciones en Vallenar hace más de cuatro años.

En un tema completamente distinto, el segundo sacerdote investigado es Daniel Pauvif, por presuntas faltas graves e incongruentes con el ministerio sacerdotal. Actualmente, Pauvif estaba destinado en la comuna de Diego de Almagro.

Las denuncias fueron recibidas en agosto de este año y junto con comprometerse a colaborar activamente en el proceso, el Obispo de la Región de Atacama, monseñor Gaspar Quintana, aclaró que en ambos casos se trata de una investigación y no una acusación.

De acuerdo a las normas emanadas por la Santa Sede y al Protocolo de la Conferencia Episcopal, el Obispo ha determinado como medida cautelar, la prohibición del ejercicio público del ministerio a los sacerdotes investigados, y se les ha apartado de toda responsabilidad pastoral mientras duren los procesos.