El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anunció este viernes la aprobación de un crédito de 4.000 millones de dólares por parte del Banco de Desarrollo de China, como un nuevo aporte para el fondo común de cooperación que mantiene su país con el gigante asiático.

“Se aprobó ya un nuevo aporte para el fondo (…) yo no tengo los detalles técnicos de última hora, pero el encargado por la parte china de ejecutar este nuevo tramo y de inyectar 4.000 millones de dólares es el Banco de Desarrollo de China”, anunció Chávez, durante la visita a un conjunto de viviendas construido en cooperación con el país asiático.

La firma del nuevo crédito “debe ocurrir en estas semanas que vienen de agosto”, aseguró el mandatario en declaraciones transmitidas por el canal estatal VTV.

Chávez también detalló que Venezuela aportará por su parte otros 2.000 millones de dólares a este fondo común de cooperación, que surgió en 2007 y que financia -entre otros- proyectos habitacionales, sobre energía e industriales.

“Cuando ese nuevo tramo de 6.000 millones de dólares ya esté llegando a su fin digamos, como un vehículo que tú vas manejando y está en la reserva de gasolina o de combustible, entonces empezamos a activar de nuevo los mecanismos para inyectar de nuevo 6.000 millones de dólares”, dijo Chávez, explicando el mecanismo y añadiendo que su país paga los créditos “con una cuota petrolera”.

El aporte anterior para este fondo binacional había sido acordado en febrero de este año, cuando China puso otros 4.000 millones de dólares, que iban a ser utilizados en parte para construir viviendas sociales.

Chávez no detalló para qué se usarían los nuevos recursos, pero sí explicó que los convenios con China son “de igual a igual”. “Aquí no hay imperio chino en Venezuela, no”, dijo, respondiendo a la vez a la oposición que critica constantemente la creciente deuda con el gigante asiático.

El mandatario también informó este viernes que “pronto empiezan a llegar” de China unos aviones de transporte militar que sustituirán a los Hércules estadounidenses, debido a que el gobierno norteamericano “no quiere suministrarnos ni siquiera los repuestos”.

En los últimos años, Pekín ha otorgado a Caracas unos 30.000 millones de dólares en créditos. Venezuela, por su parte, le vende unos 400.000 barriles diarios de petróleo a China.