China rechazó el sábado las críticas a su postura sobre Siria y acusó a ciertos países de entorpecer una solución política al conflicto, un día después de la adopción en Naciones Unidas de una resolución que critica la impotencia del Consejo de Seguridad para presionar a Damasco.
“Hemos afirmado en diferentes ocasiones a las diferentes partes que las demandas y aspiraciones del pueblo sirio por un cambio y en defensa de los intereses legítimos se merecían el respeto”, declaró el sábado Wang Kejian, un alto responsable del ministerio chino de Relaciones Exteriores.
“China adopta una actitud positiva y de apertura” sobre Siria, aseguró en conferencia de prensa, al día siguiente del llamamiento del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon a las grandes potencias para que superen sus “rivalidades” con fin de poner fin al conflicto.
“Los países que formulan críticas infundadas a propósito de la postura china sobre Siria (…), al defender sus propios intereses geoestratégicos, tratan de entorpecer e incluso de minar una solución política al conflicto. Al mismo tiempo, tratan de endosar la responsabilidad de las dificultades a otros países”, añadió.
La Asamblea General de la ONU adoptó el viernes una resolución con valor simbólico y no vinculante, a diferencia de los textos adoptados por el Consejo de Seguridad, que denuncia entre otros el bombardeo de las ciudades rebeldes por parte del ejército sirio. Fue adoptada por 133 votos a favor, 12 países votaron en contra, incluidos Rusia y China, dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad.
Moscú y Pekín han bloqueado en el Consejo de Seguridad tres proyectos occidentales de resolución para condenar la represión llevada a cabo por el régimen sirio.
