La Corte Suprema se apresta a iniciar este jueves el juicio de 38 sospechosos del mayor escándalo de corrupción política en Brasil, que estuvo a punto de tumbar el gobierno del exmandatario Luiz Inacio Lula da Silva.

El denominado ‘juicio del siglo’ por la prensa brasileña es considerado el más importante en la historia de la Corte, y según varias estimaciones, se extenderá durante más de un mes.

El Supremo Tribunal Federal juzgará a 38 exministros, exdiputados, empresarios y banqueros supuestamente involucrados en una red de compra de votos en el Congreso, orquestada por el Partido de los Trabajadores (PT, en el gobierno desde hace 10 años) entre 2002 y 2005.

Lula, que no figura entre los acusados y logró ser reelecto hasta 2010 un año después del estallido del escándalo, siempre negó estar al corriente, se declaró traicionado y ofreció disculpas públicas.

El caso es objeto desde hace varios días de grandes titulares, horas de cobertura radial y televisiva, suplementos y rúbricas especiales en sitios web de información. Su desenlace puede afectar el resultado de las elecciones municipales de octubre, que diseñarán el mapa político para las presidenciales de 2014.

“Es también una prueba para el sistema judicial brasileño; su credibilidad está en juego”, dijo a la AFP David Fischer, politólogo de la Universidad de Brasilia.

El abogado de José Dirceu, uno de los principales acusados y ex jefe de gabinete de Lula, niega la existencia del ‘mensalao’.

“No existió la denominada compra de votos. No es verdad que está comprobada la utilización de dinero público (…) Decenas de testigos afirman categóricamente que Dirceu no tenía conocimiento de los préstamos y las transferencias (de dinero)”, dijo el abogado José Luiz Oliveira Lima al diario O Globo de este miércoles.

El juicio comenzará este jueves con la lectura de un informe de uno de los 11 ministros del STF a cargo del caso, Joaquim Barbosa. Seguirá luego el discurso de la acusación, por parte del fiscal general Roberto Gurgel, que calificó el caso como “el esquema de corrupción y de desvío de fondos públicos más atrevido e indignante jamás visto en Brasil” en un documento enviado a la corte.

El viernes, los ministros del STF escucharán los argumentos de la defensa. Los abogados tendrán una hora para defender a cada uno de sus acusados.

El 16 de agosto, el ministro Barbosa comenzará la fundamentación del voto que condena o absuelve a cada acusado. Según el desarrollo más probable del proceso, cada uno de los demás ministros votará luego a favor o en contra de la propuesta de Barbosa, y si hay una condena, discutirán la pena. Esto se repetirá 38 veces, para cada acusado.