El Programa Mundial de Alimentos (PMA) garantizó este viernes apoyo a los planes contra el hambre y la desnutrición que impulsa el gobierno de Daniel Ortega, pero adelantó que la ayuda disminuirá en la medida que Nicaragua reduzca la pobreza, anunció la directora del organismo, Ertharin Cousin.

“Estamos muy comprometidos a seguir trabajando” con Nicaragua, porque el PMA ha comprobado que los fondos “han sido bien invertidos” en sectores pobres, afirmó Cousin, durante una reunión con el presidente Ortega, retransmitida por medios oficiales.

No obstante, advirtió que “en la medida que Nicaragua se vuelve un país de medianos ingresos” los donantes “van a dar menos dinero” al PMA para los programas que se desarrollan en este país.

“Como somos una organización que depende un cien por ciento de los donantes voluntarios” es necesario que el gobierno nicaragüense defina sus prioridades, dijo Cousin.

Ortega agradeció el apoyo del PMA a las familias pobres de Nicaragua y la decisión de mantener la ayuda en los proximos años.

En Nicaragua “hemos avanzando aunque todavía tenemos mucho trabajo por delante”, señaló Ortega.

Con el tiempo “queremos que nuestras capacidades se limiten a un rol de asistencia técnica” y por último solo “como asesor”, explicó horas antes Cousin tras reunirse con el canciller Samuel.

El PMA ha ayudado durante 40 años a Nicaragua, que junto a Haití y Honduras son los países con los más bajos ingresos y mayor déficit de alimentos en el continente americano, según la entidad.

Esa agencia de Naciones Unidas considera, sin embargo, que Nicaragua ha logrado “resultados positivos” en la lucha contra el hambre y la pobreza (44,1%) en los últimos años.

El PMA ejecuta actualmente programas de ayuda alimentaria que benefician a más de 300.000 nicaragüenses, entre ellos el proyecto Merienda Escolar, de atención a mujeres embarazados, niños en riesgo nutricional y el programa Trabajo por Alimento en el campo.

Para el período 2013-2017, el PMA espera invertir cinco millones de dólares anuales en ayuda alimenticia para reducir la desnutrición, que afecta al 19% de los 5,8 millones de nicaragüenses.