A la pena de presidio perpetuo simple fueron finalmente sentenciados Luis Gómez Rojo y Víctor Bolados Lara, por el homicidio calificado del empresario minero Fernando Muñoz Tapia, hecho ocurrido en la Cuesta Los Porotitos, el 25 de mayo del 2011.

A fines de ese mes, y cuando ya la familia del empresario santiaguino había realizado una denuncia por la desaparición del hombre de 57 años, unos pirquineros hallaron su cadáver en el lugar ubicado a unos 20 kilómetros al norte de La Serena. Su cuerpo se encontraba calcinado en 50%, hallándose además con heridas en su cráneo, torax y extremidades inferiores. La PDI sólo logró identificarlo por medio de las huellas dactilares, ya que no portaba documentos ni dinero.

Según informó el Ministerio Público, el Tribunal Oral de La Serena acogió los planteamientos de la Fiscalía de la ciudad, en torno a que el crimen se cometió con premeditación, alevosía, ante la promesa de un pago en dinero que Gómez Rojo haría a Bolados Lara para concretar el delito.

El plan se habría urdido a raíz de una millonaria deuda que Luis Gómez Rojo mantenía con la víctima, quien además era su socio para labores mineras.

Según el relato de la Fiscalía, el 25 de mayo de 2011, Gómez Rojo quedó de juntarse con su socio en la cuesta, donde habría sido abordado por Bolados. Ambos golpearon en la cabeza a la víctima con un fierro tipo diablito y le causaron heridas cortantes. Al día siguiente, Gómez Rojo concurrió al sitio del suceso para incinerar el cuerpo y borrar la evidencia del delito.

Tras el juicio, el Tribunal Oral consideró que ambos eran culpables de homicidio calificado y que sus declaraciones tuvieron un carácter mendaz, así como contradictorias y equívocas. Respecto a la sentencia, la fiscal Carolina Caballero dijo que se explica porque este crimen “se trata de un hecho bastante grave. Fue bastante fría la actuación de ambos acusados y en ningún momento reveló arrepentimiento de ambos. El mismo tribunal consideró que tuvieron la colaboración de los hechos”; dijo.

Los jueces del Tribunal Oral, Caroline Turner y Marco Flores, no concedieron ninguno de los beneficios para los imputados, quienes deberán cumplir su sentencia de manera efectiva.